Reseña - Venom

Capitán Pada y sus Monitos

Este contenido incluye spoilers @eseauto IG: elinstadepada Nada como ir a ver una película y crearte tu propio juicio. Por eso, las opiniones vertidas en éste espacio cuando se trate de reseñas, básicamente se reducirán a dos caminos: a que no dejes pasar una película, y sobre todo, a que, con base en lo me leíste, decidas si quieras verla o no. Difícilmente les diré que no vean algo. Háganle caso a su instinto. Porque imagínense, si todos le hubíeramos prestado demasiada atención a las primeras críticas de la película de Venom, entonces ésta no hubiera roto el récord de mejor estreno en octubre de todos los tiempos. Que no está taaaan complicado, considerando que no hay estrenos fuertes y que se encuentra entre el limbo de los estrenos del verano y los estrenos de Navidad. Ahora bien: claro que se van a encontrar con una película que no cumple con lo que todos hubiéramos querido. Que se complica la existencia solita, que se revuelve sin que nadie la agite y que, perdonen la comparación pero no puedo creer que en un mismo año tuvimos Avengers: Infinity War y Venom, y existen kilómetros de diferencia entre la buena realización de una y de otra. Sí. Ya sé. Me van a decir que la primera lleva construyéndose 10 años, y la otra...pareciera de dos sentadas de guión, pero aún así, la formulita de origen del personaje con villano copia en negativo del protagonista se ha gastado. La tuvo Iron Man... hace 10 años. La tuvo Ant-man hace 3 años...y no es la más fuerte ni del MCU ni de nada. La tiene Venom, y hoy en día, es imperdonable. Y abusados porque te estoy mirando a ti, película de Shazam. Es por esta razón que mi primer pensamiento al salir de la sala, fue que Venom hubiera sido un peliculón. En 2003. Si. Aquel año en el cual todavía nos dabamos permiso de tolerar producciones como la primera película de Hulk o hasta las de Daredevil, la primera de Tomb Raider y la adaptación de The League of Extraordinary Gentlemen, porque pues es lo que habia, y a veces nos iba muy pero muy bien como con la primera de Spider-man y X2, la secuela de X-Men. Hoy en dia no es lo que hay, y el mal llamado genero de superhéroes ya está bastante madurito como para dar unos pasos hacia atras, como lo hace la película de Venom. Saben cómo me sentí? Como cuando vimos en el mismo mes de 2008, The Dark Knight, y Hellboy II: The Golden Army. Dos secuelas pero con un abismo de diferencia entre ellas. Tom Hardy es un excelente actor... de reparto. Duro pero cierto. A menos que queramos culpar al director de Venom, Ruben Fleischer, por no convertirlo en un protagonista mucho, pero mucho más carismático. Apenas y se esboza algo de verdadera personalidad que llene la pantalla en su totalidad, y la soporte durante sus 112 minutos. Pero a pesar de todo, habrá secuela, claro. Porque dejo dinero y porque morimos por ver a Carnage. Corrijo: queremos ver a Woody Harrelson como Carnage, como ya estaba más que cantado que pasaría para el final de ésta primera entrega. Pero deberán tener mucho cuidado: porque deberán comprender que lo que menos queremos es ver simbionte contra simbionte contra simbionte para entonces convertirse en una película de Transformers donde lo único que alcanzas a percibir son pedazos de metal dándose chinazos, pero aquí serían chicles contra chicles. Además, es muy probable que si se sigue descuidando a Hardy, el mencionado Harrelson se lo coma, de manera figurativa, convirtiéndose en el Jack Nicholson de su Michael Keaton. Sí. No hay nada como ir a ver una película y crear tu propia opinión. No hay nada como ir a ver Venom, y decidir en dónde acierta, y en dónde falla. Si quieren checar los easter eggs, las curiosidades y la información extra sobre “Venom” escuchen esta reseña en formato podcast aquí mismo.