[36] El Esclavo Moderno - El Mundo Al Revés #PODCAST

El Mundo Al Revés

El esclavo moderno no tiene derecho a nada y los pocos placeres que tenía como el disfrute del espacio público, ciertas cuestiones culturales, el calor de buenas amistades o relaciones sociales / culturales las va perdiendo o se las van quitando. Festejos populares, festividades han sido canceladas, sí CANCELADAS, otras conductas populares y de pertenencia que hacen a la identidad de los individuos y sus sociedades, como el compartir del mate por ejemplo, han sido por poco criminalizadas y modificadas en poco menos de un año y medio. Al esclavo moderno le aprietan más y más las cadenas y no se da cuenta, al esclavo moderno lo invitan a ser parte de un apartheid mental y a separarse de sus semejantes de forma voluntaria... y el esclavo moderno agradece, mira Netflix. Mientras tanto los amos del mundo van y vienen en sus jets privados, sus hijos se divierten desde casa con todas las comodidades y la heladera llena, tienen agua filtrada, baños lujosos, gimnasios dentro de sus lujosos complejos de vivienda, interacciones sociales, salud mental y por sobre todo, se suben a sus coches de lujo y viajan a disfrutar de la naturaleza mientras el ganado humano se asina en favelas y villas... Y como me dicen algunos "este país es una mí*erda" "hay que irse a otro país", vean... es en todos lados la misma situación, somos ganado en todos lados y los procesos de opresión de clase, de marginalización de las masas, se dan en todas partes. El esclavo moderno no sabe producir su propio alimento y es obligado a pagar precios exuberantes por el mismo, el esclavo moderno no tiene tierras, no tiene casa, trabaja día y noche para pagar incansablemente por cuatro paredes y un techo al cual debería llamar de hogar, del cual no puede salir. El esclavo moderno tiene nacionalidad pero nada dentro de su país le pertenece. El esclavo moderno no viaja, no sé desplaza de un lugar a otro, simplemente ocupa su espacio, al igual que las ovejas lo hacen en el corral... mientras tanto los dueños de la granja no paran de viajar, como si fuesen los dueños del mundo. El esclavo moderno, mientras tanto, pierde más y más terreno al igual que Palestina, y el apartheid del poder avanza día tras día al igual que Israel. La opresión en fin es opresión, venga de quién venga e incomode a quien incomode y lamentablemente, parece que los principales actores políticos partidarios e institucionales concuerdan con este sistema, al igual que concuerdan con los organismos supranacionales, al igual que concuerdan con el FMI y la estafa de la deuda.